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"Yo desprecié los grados y distinciones. Aspiraba a un destino más honroso: derramar mi sangre por la libertad de mi patria" Simón Bolívar

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Estarán organizados en 1.065 batallones, uno por cada parroquia del país

Más de medio millón de milicianas y milicianos tendrá Venezuela antes de 2011

8 noviembre 2010 |

El comandante de este cuerpo armado voluntario es de primera importancia para un país que aspire a ser independiente en un mundo en el que las potencias pretenden imponer su dominio a expensas de la soberanía de las naciones

Oviedo: "“Todos somos responsables de la seguridad de la nación, y por ello debemos organizarnos en cuerpos combatientes, en la milicia territorial"

“Queremos paz, no la guerra, pero tenemos que estar preparados. De lo contrario, son muchas las posibilidades de que nos agredan. Razones para creerlo nos sobran”. Con esta declaración, el comandante de la Milicia Bolivariana para la región central, general de división Gabriel Oviedo, dejó en claro su convicción sobre la necesidad de conformar una fuerza en la que la población participe de manera voluntaria: la Milicia Nacional Bolivariana.

La creación de este cuerpo armado, agregó Oviedo, es de primera importancia para un país que aspire a ser independiente en un mundo en el que las potencias pretenden imponer su dominio a expensas de la soberanía de otros.

“Todos somos responsables de la seguridad de la nación, y por ello debemos organizarnos en cuerpos combatientes, en la milicia territorial, de esa forma nos estaremos preparando para cualquier eventualidad no sólo desde el punto de vista bélico, sino natural o de orden interno”, explicó el general en su intervención en el foro El Papel del Pueblo en la Defensa Integral del Territorio.

En ese sentido el general Oviedo afirmó que el factor tiempo es vital, por lo que a que aspira se constituyan más de mil batallones -uno por cada parroquia del país- antes de que finalice el año.

“La proyección que tenemos es de conformar 1.065 batallones organizados a nivel nacional. Cada uno contará con 500 hombres y mujeres por lo que la nación tendrá a su disposición más de 500.000 patriotas”, expresó Oviedo, quien junto a Rojas exhortó a todos aquellos y aquellas milicianas ser coordinadores y enlace entre los consejos comunales y la Milicia.

La Milicia Nacional Bolivariana, como sus lineamientos lo dictan, es un cuerpo especial creado por el Ejecutivo Nacional con el propósito de brindar apoyo y reemplazo a los componentes de la Fuerza Armada Nacional que así lo requieran.

Angelo Rojas, del colectivo revolucionario Alí Primera de la parroquia El Valle, también fue ponente del foro. En su intervención planteó que la defensa del territorio debe ser integral “porque las batallas se libran de manera exitosa si cada uno de los venezolanos toma conciencia de su corresponsabilidad en la salvaguarda del territorio”.

URGE SU CONFORMACIÓN

La unión cívico-militar del 13 de abril de 2002 impulsó la formación de este componente

Oviedo fue enfático al señalar que Venezuela, por su ubicación geográfica privilegiada y por sus grandes potencialidades económicas, está en la mira de los grandes imperios, que desde siempre han manifestado sus apetencias de recursos naturales, como el petróleo, el agua potable y los alimentos.

Señaló que la historia da suficientes ejemplos de cómo la movilización popular puede encarar y revertir estas amenazas, y destacó la coyuntura del golpe de Estado de abril de 2002.

En este sentido, destacó que a pesar de que el pueblo no estaba preparado ni formado militarmente y para la defensa de la patria, fue quien recuperó la continuidad democrática el 13 de abril junto al sector militar patriota.

El general recordó que el pueblo tuvo que enfrentar a la Iglesia, agentes el propio Estado, al empresariado y a una representación “de una oposición política apátrida y pro estadounidense”. Esto, recalcó, es un hecho inédito en la historia de Venezuela: la unión cívico-militar para reponer a al Presidente elegido democráticamente. En su opinión, fue una acción que ha impulsado la transferencia al pueblo de todo el conocimiento teórico y práctico para el uso de cada uno de los elementos de resistencia, necesarios para que, llegado el momento, estemos en capacidad de sumarnos a la lucha en defensa de la patria.

EL EJEMPLO DE OTRAS NACIONES

En el foro se hizo énfasis en la historia y en eventos recientes, que revelan que con la excepción del presidente Chávez y más recientemente Rafael Correa, mandatario de Ecuador, el resultado de los golpes ha sido siempre nefasto. El ejemplo de Manuel Zelaya, defenestrado por los factores del poder político y económico de su país, es elocuente. Ni siquiera la fuerza de los organismos internacionales (OEA, ONU) pudieron reintegrarlo a sus funciones.

Más atrás en el tiempo está el caso de Salvador Allende, en Chile, quien además de ser derrocado fue asesinado. A propósito de estas lecciones, el profesor y escritor venezolano Oscar J. Camero otro de los ponentes, enfatizó que no se puede pecar por inocencia nuevamente: “Un pueblo ignorante y desprevenido es el caldo de cultivo para el mantenimiento en el poder de una derecha política abusiva y explotadora. Allende tuvo el desacierto de no organizar a las masas hacia un cultivo sostenido (y defensivo) de la conciencia democrática y republicana, que sólo se quedó en el germen impulsivo y teórico”.

EL ESLABÓN QUE FALTABA

Otro asunto que los ponentes pusieron de relieve es que la milicia está presente en toda nuestra historia independentista y en la de otros pueblos. Es decir, no es un invento del Gobierno Revolucionario, como algunos detractores quieren hacer ver.

Pero, la Milicia Popular Bolivariana organizada sí fue creada por el Comandante en Jefe Hugo Chávez Frías con el fin de ser el complemento cívico/militar de los cuatros componente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.

Para muchos es el eslabón que faltaba para la defensa de la soberanía nacional y el resguardo territorial parroquial. Como afirma Rojas, “hoy más que ayer el pueblo está alerta y rodilla en tierra ante cualquier amenaza extranjera y/o nacional de grupos apátridas que osen ir contra la democracia, la libertad y la soberanía de Venezuela”.

Agregó que sumarse a la lucha en defensa de la patria va desde producir los alimentos que requieren el pueblo y el ejército en combate, hasta profundizar el arraigo de nuestros valores en la población y la resistencia armada.

T/Raúl Méndez
F/Alberto Corro
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